Lanús es la grata revelación de los últimos torneos del fútbol uruguayense. Para conocer detalles dialogamos con el «padre de la criatura», Marcelo Reynoso, para que nos cuente sus sensaciones.
Lanús está viviendo temporadas muy buenas; desde que, en junio del año pasado asumió como técnico Marcelo Reynoso muchas cosas han cambiado, se formó un plantel donde sobran los jugadores de «buen pie» y a partir de ello se ha transformado en gran protagonista de los últimos torneos del fútbol uruguayenses.
Lanús, en fútbol, es un club al que no le sobra nada y más después del fallecimiento de «Canón» Salas, al alma mater del club, pero entre el técnico y un grupo de jóvenes que le pusieron el pecho a la situación, la van sacando adelante y un título sería el mejor homenaje que se le podría rendir a «Canon».
Con Marcelo, técnico desde el 2004 después que dejara de ser jugador y que antes de llegar a Lanús pasó por varios clubes siempre con Rivadavia como epicentro, tanto de jugador como de entrenador, dialogamos acerca del buen momento por el que pasa el club y sus sueños.
¿Cuál es tu trayectoria como técnico?
Soy técnico desde el año 2004 cuando comencé a dirigir la escuelita en Rivadavia, tenía 17 años; este año cumplí 20 años dirigiendo. Pasé por infantiles juveniles y primera, ayudante del Federal de Santiago Losada en Gimnasia; profe de la primera local, dirigí selecciones juveniles también. Tengo tres etapas en Rivadavia pero además dirigí al Atlético Colonia Elía y Parque Sur además de dirigir por algunas temporadas a la selección de la Liga local en formativas.
Pero también fui jugador -nos aclara Marcelo-. Jugué en Rivadavia siempre hasta el año 2006; en primera en Rivadavia debute en el año 2003 con 16 años. Jugué desde los 4 años hasta los 20 años (central o lateral bastante rústico), jugué un Regionalito y un Clausura de la Liga Regional con San Martín de Herrera; desde ahí no jugué más y me dedique a estudiar y dirigir.
¿Desde cuándo estás en Lanús?
Estoy en Lanús desde junio del año pasado un poco más de un año. Un club que me acogió de la mejor manera donde estoy muy feliz, muy cómodo y con muchas ganas, gracias obvio al aguante de mí familia.
¿Se complicó el club con el fallecimiento de Canón Salas?
Sí, la verdad que sí. El me llevó y al mes se nos fue. Yo había ido solo a darle una mano y terminé manejando la parte fútbol en el club; se nos complicó pero con un grupo de jóvenes sobrinos, gente de barrio, nos fuimos acomodando a medida que pasó el tiempo.
¿Cómo fuiste armando este equipo?
Primero miré y evalúe todos los chicos que eran del club luego, en el segundo torneo que disputé, trajimos el arquero de hoy (Valentin Vázquez) un central (Román Martínez) y potenciamos lo que teníamos, y en la Copa trajimos a los pibes Delfino y ahí quedó la base de lo que es hoy con lo que sabía, estaba seguro, que con el tiempo iba a ser un gran equipo, hoy es sólido está muy entrenado y laburado y le agarró el gusto a ganar.
El 8 de julio del año pasado a poco tiempo de que falleciera Canón escribimos en nuestra página que «Lanús debe defender el legado que deja «Canón» Salas». Sin dudas que los jóvenes del club lo están haciendo y de la mejor manera.
¿No tener un buen lugar para entrenar es una ventaja que dan?
La vamos piloteando en la cancha dentro de todo podemos trabajar, creo que con un piso más acorde este equipo se potenciaría más aún. Los días de lluvia le buscamos la vuelta para tratar de que la cancha que tenemos que la usan los infantiles para jugar no quede un «chiquero» y ocupamos la plaza de El Mirador; no es lo adecuado pero nos acomodamos y amoldamos con el profe y los dirigentes, ni hablar gran predisposición de estos jugadores. Lo bueno es que «laburamos» y no perdemos días que es la clave de este equipo,
¿Qué le ha faltado para ser campeones?
Creo que el torneo pasado que quedamos en la puerta, perdemos un partido increíble con Almagro que lo íbamos ganando, y un empate injusto con María que nos dejaba casi a 3 puntos de Gimnasia y ganábamos el torneo. Nos faltó poquito quedamos a un punto nada más pero creo que sí había un merecedor del título era Lanús por como jugó al fútbol, sin menospreciar el campeón que por algo ganó.
¿Cuál es el máximo sueño con el Grana?
Salir campeón es el sueño de todos nos deja en la historia más allá que ya cambiamos gran parte de la historia, esto nunca se vivió en el club por todo lo que me expresan día a día, hoy es un barrio que está feliz y se respira fútbol; los chicos y grandes esperan el «finde» para ir a la cancha porque el equipo les llega, y eso para mí no tiene precio salir campeón es el sueño de un barrio entero y pelear la copa, clasificar, pasar de ronda sería coronar algo lindo también.
(Nuestro agradecimiento a Marcelo por su gentileza y a Delfina Villagra por las buenas fotos que ilustran la nota)