El atletismo necesita sponsors, gente y empresas que colaboren con los atletas. En el Gran Prix se dio un buen paso para ello.

El automovilismo, en la versión que se busque, tiene sus promotoras que auspiciando empresas relacionadas al deporte motor se paran detrás del piloto entrevistado, principalmente, para promocionar a las empresas que las contratan.
Por ejemplo, en el MotoGP, las «promotoras» suelen ser modelos que realizan tareas de promoción para las marcas patrocinadoras durante los Grandes Premios. Su función incluye interactuar con el público, entregar material promocional, participar en actividades de entretenimiento y posar para fotos. Muchas veces son las propias esposas de los pilotos las que están a su lado.

En el atletismo no se había visto aunque el Gran Prix del Mercosur aporta hasta ese detalle aunque, en este caso, fue por un hecho de solidaridad y compañerismo. Transcurría la prueba de lanzamiento de la bala mujeres y la llovizna se transformó en lluvia por lo que el juez de la prueba, el colonense Gabriel Bonato, pidió a los que estaban bajo el toldo de cálculos si no había un paragua. Ahí apareció la profe Lucrecia Minetto para ir asistirlo y en vez de dárselo se comprometió a colaborar y tener el paragua dado que iba a ser complicado para Gabriel sostenerlo y medir los lanzamientos. De ahí a la foto de la promotora hubo un paso y el atletismo dio un nuevo paso buscando sponsors.