Nico Germanier, se ha transformado en una de las grandes promesas del Lobo y él la alimenta con mucho trabajo para que así sea.
En el fútbol como en cualquier otro deporte hay jugadores que juegan bien o muy bien sólo por el talento que Dios supo darle; pero hay otros que además de jugar bien o muy bien, saben por qué lo hacen, entienden el juego y a ese talento lo ayudan con mucho entrenamiento, son muy profesionales. En este sector se encuentra Nico Germanier, un talentoso que puede jugar en varios puesto y siempre lo hace con criterio, sabiendo a lo que juega.
Lejos está aquel juvenil que llegó desde Rivadavia tratándose ganar un lugar, primero en la local y luego en el equipo del Federal A. Hoy se ha consolidado y va por más.
Su juego fue creciendo producto de un entrenamiento serio que lo convirtió en uno de los pocos jugadores de la zona con gambeta a mucha velocidad y gol. El domingo lo demostró ante Juventud de Urdinarrain; arrancando casi desde el banco de suplentes del local para ir dejando el en el camino a rivales y terminar metiendo un terrible zurdazo que se le metió en el ángulo al uno de Juventud. Ante Santa María de Oro había hecho una jugada pero por la izquierda. Esa vez el travesaño salvó al arquero concordiense,
Llegó como delantero pero, por visión o urgencia, pasó a jugar de lateral por izquierda y también como volante por ambos sectores.
Sobre esto nos comenta su actual técnico en la Copa Entre Ríos del Lobo, Angel Gómez «Nico es un jugador muy completo en el sentido que te puedo jugar de volante, extremo y hasta de lateral. Siempre teniendo en cuenta que su mayor velocidad es el ataque, gambeta velocidad, «limpiarte» en el uno contra uno. Para nosotros es un jugador muy interesante y muy importante para el equipo por hace la diferencia en cada partido. Va por afuera, por adentro y siempre con el arco en la mira. Lo que también veo es que, desde el año pasado a ese momento, ha mejorado mucho la parte táctica, porque entiende cuando hay que ir, cuando retroceder lo que lo hace un jugador más completo. Es un jugador muy solidario para con el equipo».
Agrega Angel que «su crecimiento no es casualidad, está basado en un gran sacrificio, en un entrenamiento serio y responsable por lo que seguramente su techo aún está muy lejos».
Con apenas 23 años Nico se ha convertido en un jugador para ser tenido en cuenta en cualquier nivel que juegue Gimnasia; le sobra talento y mente; le agrega profesionalismo para que la ecuación es la que se necesita para ser un gran deportista. En su instagram escribió lo que significa eso para el «Seguir trabajando duro, incluso cuando nadie te esté viendo» debajo de su video del golazo de la Copa.
(Fotos gentileza Delfina Villagra)