Como alguna vez lo hizo su papá, el ‘Yiyo’, Iván se encuentra en jugando en Ecuador.
En el 2001 Guillermo Montalbetti, aquel talentoso jugador de la época dorada del Lobo con mayoría de jugadores locales, se fue a jugar a Ecuador, recalando en el Deportivo Cuenca.
Eso, 20 años después, termino abriéndoles las puertas para que su hijo pueda tener una oportunidad en un club donde el Dr. Cristian Albarracín, es dirigente del Azogues e hincha fanático del Cuenca. Así Iván llegó al Azogues Sporting Club, que milita en la segunda división y pertenece a la ciudad de Azogues, provincia del Cañar.
Iván, integrante del plantel de Gimnasia que fuera tricampeón local, es otro de los jugadores con poco lugar para crecer y que deciden emigrar. El presente le sonríe y nos cuenta su linda historia.

¿Dónde fueron tus comienzos en el fútbol?
Yo comencé a jugar al fútbol en Rivadavia donde día mis primeros pasos.
¿Recordas quien fue tu primer entrenador?
No recuerdo quien fue mi primer entrenador pero sí que después, en la categoría 95 (yo soy categoría 96 pero jugaba una más arriba. Más de grande recuerdo que tuve al ‘Mono’ Víctor Brisolessi y también me entrenó Marcelo Reynoso.
¿Después de Rivadavia, donde jugaste?
Después de Rivadavia pasé al Depro que estaba formando sus inferiores y como mi papá (Guillermo Montalbetti) dirigía ahí pasé a jugar en sus inferiores. Estuve un año y pasé a jugar a Atlético Uruguay donde me dirigía ‘Pechito’ Villalba, siempre jugando en la categoría ’95. Marceo Reynoso me habló de una posibilidad de jugar en Gimnasia y me llevó como refuerzo para el provincial de clubes sub15 y ahí arranqué a jugar en Gimnasia.

¿Hubo un momento en el que estuviste a punto de dejar el fútbol?
Si tuve un momento en el que tuve ganas d dejar el fútbol; estuve en la etapa que estaba Hilario Bravi (segunda etapa) , estaba en el plantel del Federal y después vino Víctor Zwenger. En 2015 tuve la oportunidad de ir al Atlético Rafaela. Pero, por distintas causas no quedé, estaba muy ilusionado porque se daba todo para quedar en las inferiores y cuando no tuve la oportunidad de quedarme se me vino el mundo abajo y tuve muchas ganas de dejar el fútbol.

¿Pero pronto te recuperaste y volviste al fútbol?
Después de pasado ese mal momento volví al Depro que me llamó; hablé con Fabio Joannás que era el técnico en 2016 y arranque a jugar ahí.
Después, en el 2018, cuando Facundo Bonvin agarra en Gimnasia fui hablar con él y le dije que quería sumarme y arranqué de cero nuevamente en la local. Fue todo un éxito dado que conseguimos un tri campeonato, pude jugar casi todos los partidos como lateral. A mitad del 2019 me fui a Juventud de Caseros y de ahí pasé a Defensores de Colón que fue mi último club previo a mi viaje a Ecuador.
¿En qué club estas ahora?
Estoy en el Azogues Sporting Club que es mi club en estos momentos.

¿Cómo fue que llegaste ahí?
Es una linda historia la de mi llegada a Ecuador. Todo fue gracias al doctor Cristian Albarracín, ecuatoriano, dirigente del club y muy hincha del Deportivo Cuenca club en el que jugó mi papá en el 2001. Es un fanático del Cuenca tanto que hasta tiene un museo del club. Como le faltaba una camiseta del 2001 se contactó, vía facebook, con mi papá y hablando se le preguntó si había alguna posibilidad de realizar alguna prueba en el club. Tuve que mandar un video y me vine a probar suerte porque estaba trabajando y entrenando pero estoy acá gracias a él.
¿Qué clase de clubes es el Azogues Sporting Club?
El club es muy importante, que tiene mucho prestigio acá en el Ecuador, que supo estar en la primera división, Liga Pro como se llama acá. Ahora estamos peleando por un ascenso pero se trata de un club de mucho prestigio.

¿Y su infraestructura cómo es?
Su infraestructura no es muy rica; por lo poco que pude saber tuvo problemas económicos desde hace unos años y esto le ha impedido crecer aunque también ha perdido muchas cosas, como predios y otros. Igualmente cuenta con un estadio muy bonito y los predios para entrenar se los alquila.
¿Siempre jugando de lateral o tenes alguna otra posición?
En realidad mi posición siempre fue la de volante central aunque también jugado como lateral o volante por afuera. Pero lo que más me gusta y es la posición que estoy ocupando acá en Ecuador es la de volante central.

Lo que quieras decir o agradecer para el cierre
Primero y principal quiero agradecerle a mi familia, la que siempre está y cuando me refiero a ellos es a todos aquellos que forman parte. Abuelos, tías, tíos, a todos lo que siempre han estado, en las buenas y en la malas. Pero, en especial a mis padres (Guillermo y Nidia Yolanda Retamal) siempre haciendo un gran esfuerzo para que no me falte nada. No puedo dejar de agradecer a mi novia (Camila Subasnabar) que desde el primer momento me apoyó, estuvo siempre a favor de que venga.
También quiero agradecer a Ayrton Bonti quien me abrió las puertas de su complejo de fútbol 5 para poder entrenar; al profesor Juan González quien me preparó los primeros meses. También a mis amigos que siempre están ‘bancando los trapos’ como decimos.
Y no puedo olvidarme del club Defensores de Colón que me dio una mano cuando no tenía club antes de llegar a Ecuador. Al profe Marcos González, a los técnicos y a los compañeros que pese a que estuve poco tiempo con ellos por la pandemia, me demostraron que son muy buena gente.