GUSTAVO ROLDÁN, DE LA PASIÓN POR EL RUNNING A LA ANGUSTIA POR EL COVID

Deporte Digital dialogó con el Dr. Gustavo Roldán, quien además de amante del running es jefe de la Unidad de Cuidados Críticos del Hospital.

A Gustavo Roldán esta pandemia le cambió la vida porque, aunque en la UTI o la UCI del Hospital ‘Justo José de Urquiza’ convivir con la angustia de luchar por una vida es algo común, esto se ha visto multiplicado con la llegada del Covid-19 y téngalo por seguro que no es verso lo que se dice acerca del cansancio del personal de Terapia Intensiva. El propio Roldán nos cuenta que «lo del cansancio es una realidad, imaginate entrar a cada unidad con equipo y permanecer ahí, y así por seis, para sacarte todo y ponerte todo por cada box, y aparte cambiar de posición de boca arriba (supino), a boca abajo (prono); cansa fisica y psíquicamente». A esto le podemos agregar que esta pandemia parece no tener fin.
Una amiga de DD nos acercó a este amante del deporte que ahora tiene la misión de luchar por la vida de los uruguayenses en la Unidad de Cuidados Críticos del Hospital ‘Justo José de Urquiza’ de la que es jefe desde hace algo más de 3 años.
Sobre tu pasión por cualquier deporte, de la lesión que lo llevó al running, de lo que le gusta correr en la montaña y de todo lo que se vive en el Hospital habló Gustavo con DD en una nota para leer y reflexionar sobre algunas de las cosas que hacemos sin tener en cuenta a quienes nos rodean, y el propio Roldán nos comenta en relación a esto que «la empatía es la capacidad o habilidad de ponerse en la situación del otro, cognitiva y emocionalmente».

¿Cómo se compone tu familia?
Mi familia es pequeña, vivo con María Laura, la genia de mi vida, y nuestra hija, María Cielo, a días de cumplir 10 años, ambas me recuerdan todos los días la realidad del amor. Mi madre (Inés Neubauer) también vive en la ciudad al igual que m familia política. Mi único hermano (Raúl Roldán) está fuera del país además tengo dos sobrinos universitarios que están estudiando en Córdoba.
¿Cuál es tu historia con el deporte?
En cuanto a mi relación con el deporte, creo que es algo que no se puede separar, desde la infancia ‘canoteando’ el Río Uruguay desde los 8 y hasta los 12 ‘maso’ (esporádicamente alguna remada se hace hoy), practiqué softboll varios años, rugby en mi adolescencia, el fútbol desde la «canchita de Altenberg» (actual plaza Urquiza) y hasta la fecha, siempre de forma no competitiva (alguna pretemporada en algún club de liga en mi vida universitaria cordobesa) hasta atletismo en el viejo Centro 12, de pibe.

¿Desde cuando te dedicas al running?
El running desde siempre pero, a los 18, tuve una lesión en la rodilla por lo que dejé el deporte de contacto competitivo y me dediqué a correr por la ciudad, o sea hace 30 años que corro habitualmente. Hoy es hermoso ver como se ‘runea’ en Concepción del Uruguay. Cuando arranqué no corría nadie, no existía la tecnología en ‘pilchas’ ni en ‘zapas’ con la que contamos hoy. Se decía correr, luego footing pero nada que ver con el running actual .

Cuáles son tus carreras preferidas, ¿calles o aventura?
En realidad no he competido mucho, lo tomo de otra manera; yo, el reloj y los Km (hoy GPS). Si es por elegir un tipo de competencia me decís calle, cemento o aventura en campo?, vamos por la naturaleza!!. En realidad ando en ambos, son muy diferentes, pero soy versátil (jajaja). En febrero del 2020, pre pandemia, fue mi última competencia, trail en el Parque Nacional Lanín, 22km de montaña, «Lanín Extremo», hermosa experiencia, amo la montaña y la Patagonia.
Corres con auriculares ¿es por alguna razón especial?
Corro sólo y con música, me encantan ambas cosas y, en cuanto a la música, no cualquiera!!, para las competencias sin auriculares dado que algunas competencias no te dejan por lo que no la llevo nunca.

¿Cuál es tu función en el Hospital de Zona?
Tengo 47 años, soy médico desde hace 20; especialista en Medicina General y Familiar, también en Medicina critica y Terapia Intensiva. A esta última es a lo que me dedico casi exclusivamente en la actualidad.
Soy nacido en Concepción del Uruguay pero estuve fuera de la ciudad por muchos años, entre idas y vueltas estoy de forma permanente desde el 2014. Desde entonces trabajo en la Unidad de Terapia Intensiva (UTI) y en la Unidad de Cuidados Críticos (UCI) del Hospital Justo José de Urquiza. Actualmente y desde hace unos 3 ó 4 años estoy a cargo de la jefatura médica del Servicio de Cuidados Críticos.

¿Cómo están siendo estos días de tantos contagios como terapista en el frente de la batalla contra el Covid?
Desde febrero del 2020 que se trabaja, al igual que todo el país y la región, en Covid-19, sin descuido del resto de la patología crítica. Hoy y desde hace unos 4 meses, a la enfermedad por COVID critica que requiere UTI y en especial la neumonía critica (la que requiere ingreso a UTI y ventilación mecánica invasiva; Síndrome respiratorio agudo severo por coronavirus 2; SARS-CoV2 la tenemos de frente y a diario. Para esto el Hospital Urquiza se ha organizado de tal forma que le da batalla, en cuanto al equipo UTI puedo decir que es genial, es maduro, es fuerte, es responsable, es humano y eso es una ventaja grande, pero, a pesar de esto, el momento es muy, pero muy difícil, se convive con angustia ya que, y como en todo el mundo con atención de calidad, el 50-60% de los pacientes con SARS-CoV2 críticos (insuficiencia respiratoria grave que requiere ventilación invasiva) se muere, o sea 5 a 6 de cada 10 muere, y esto golpea el corazón y la mente de equipo (enfermero, médico, kinesiólogo, mucamo, técnicos…..).
¿Cuentan con todos los medios para su seguridad?
En lo que hace a equipos de protección personal (EPP)) no nos falta. Pero es obvio que me gustaría tener más; por ejemplo un espacio físico de UTI más grande, tener una sala con unidades respiratorias boxeadas de pseudo aislamientos; una sala con algún box con presión negativa y flujo laminar; una sala con capacidad de UTI abierta (donde el familiar puede pasar con el enfermo critico más tiempo, comprometido con el trabajo del equipo), y otras mejoras. Digo no nos faltan elementos de protección pero podríamos estar mejor para esta y otras situaciones, para nosotros y para los familiares.
¿Qué le podes decir a la gente que parece no importarle demasiado cuidarse?
A la gente, al ciudadano, no le puedo decir más de lo que se ha dicho; que cuide y respete las distancias; que tenga buena y frecuente higiene de manos; que use barbijo; que si se expone sea responsable de esa exposición. Ya se ha dicho y se sabe que el 80% de los infectados sintomáticos la pasará más o menos bien con cuadros leves; que 15% de los infectados requieren oxigeno pero que podrán superar la situación de estado de enfermedad y con un tiempo de convalecencia mayor o menor en el tiempo, con secuela si o no y que el 5% de los internados tendrá una mala evolución, necesitara unidad cerrada, ventilación mecánica invasiva y que a pesar del esfuerzo morirá el 50-60% o más y que este último grupo existe, y que no tiene edad (y que son hijos, hermanos, padres, abuelos, tías…), que son deportistas o no, que tienen enfermedad previa o no; que son nuestros. Decirles que la empatía es la capacidad o habilidad de ponerse en la situación del otro, cognitiva y emocionalmente.

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