EN OESTE PADEL SE DESPIDE EL AÑO DE LA MEJOR MANERA

Termina el año con una buena noticia para el padel uruguayense y el complejo Oeste Padel.

El padel no deja de crecer; lo dijimos en la nota donde Círculo Padel de Diego Morat, en Villa Elisa, inauguró una nueva cancha. El crecimiento es firme y ya no como un ‘boom’ como ocurrió en la década del 90 cuando aparecían canchas hasta ‘debajo de una piedra’.
Para luchar en contra de ese crecimiento fueron muchos que le apuntaron a las lesiones que producía. Mito que, con el tiempo, fue desmentido e incluso ahora se sabe que producen menos lesiones que muchos otros deportes.
Además se trata de un deporte entretenido, que puede jugarlo cualquiera, sin demasiada o ninguna técnica mientras haya ganas de jugar y divertirse.
«En el padel vos agarrás cuatro personas que nunca jugaron y juegan. En el tenis necesitan cuatro meses de clases». Tal es la definición de Lisandro Borges sobre este deporte. Algo conoce Borges de esto, es el gestor del la única fecha del circuito Wordl Padel Tour en la Argentina y también ha organizado exhibiciones a los pies de las pirámides de Egipto y en las Cataratas de Iguazú. «Después de los ’90, en Capital Federal el deporte desapareció, pero en el interior subsistió», acota. «Esa década donde las canchas de pádel brotaban por todos los rincones junto con los videoclubes, los parripollos y los negocios de «Todo por 2 pesos».
Pero ahora la historia es diferente; lo que están haciendo los argentinos en España, con el fenomenal Fernando Belasteguín a la cabeza, es una guía y ‘el sueño de jugar en España’ alimenta a varios aunque ahora se han abierto varios ‘mercados’ como para probar suerte y sino que lo diga el ‘Tolito’ Aguirre que desde hace un tiempo juega en México o Matías Rivera, el explosivo jugador paranaense, que disputó varios torneos en Estados Unidos.
Ya no es el ‘boom’ de los ’90; es un deporte bien organizado, con muy buenos torneos para todas las categorías; con escuelas de padel que harán futuros muy buenos jugadores con ganas de progresar y una base de jugadores que va creciendo en la misma medida que los complejos. Ya no es el ‘boom’ de los 90 del que muchos se reían, es un deporte en pleno crecimiento y que amenaza arrasar con todo.
Al respecto sostiene Mariano Tartarelli «La diferencia entre los ’90 y este resurgir del pádel. Es que en la primera ola era un negocio más. El que hacía la cancha no sabía del tema, las medidas eran todas distintas. Ahora se ve como un deporte, hay otro profesionalismo, los chicos jóvenes ya saben que se puede vivir del pádel en Europa».
Tarterelli también lo sabe: jugó a nivel profesional casi una década entre la Argentina y Europa. Hoy maneja un complejo de cinco canchas profesionales en Lomas de Zamora, es dueño de la marca de paletas Souler, que se venden en España, y fabrica canchas por todo el país e incluso en Uruguay. «Este nuevo crecimiento nos sorprendió a todos los que estamos en el ambiente», sostiene.

LLEGO LA SEXTA
Y para el complejo Oeste Padel, que tan mal la pasó, como todos, en época de pandemia es tiempo de festejar en este final del 2020. Es que Nico Carvallo y Popy Parra han culminado los trabajos en su sexta cancha y cuando abran las puertas para volver a jugar habrá una nueva opción ya que el complejo tendrá seis canchas, 5 de blindex y una de paredes de cemento tradicional.
Esta nueva cancha cuenta con algunas novedades como que los vidrios utilizados son de 1×3 mientras que en las otras es de 2×3 por lo que no es necesario utilizar travesaño en su estructura.
Con esta sexta cancha nuestra ciudad cuenta con 14 canchas en sus complejos Miami, Ibiza, Locos x el Padel y Puerto Padel. La de este último complejo son las únicas al aire libre.

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